1929: Los Talleres Tipográficos Mikleff, o "la imprenta de Ramoncito". En primer término a la izquierda aparece el gerente, Sr. Ramón Balbi, emplanando un número de la Revista del Centro de Instrucción y Recreo; con sus espejuelos negros, Gustavo Gómez compone cuidadosamente un trabajo; después el joven Gilberto García (Lunguito) distribuye en los chivaletes; al centro el jefe de redacción de la Revista, Panchito Montoto, afinca todo su interés en la corrección de las pruebas; Palmiro Ortega, administrador, observa el formato de las páginas de anuncios; Carlos Siblesz comprueba la resistencia de una “rama”; y en último término, interesado en su trabajo de “tiraje”, Angelino García, el joven y atento sub-jefe del taller, donde también se confeccionaba "La Voz del Estudiante", entre otras publicaciones e impresos de todo tipo que suplían las necesidades culturales y publicitarias de Santiago de las Vegas.
Nos cuenta Roger Balbi, hijo de "Ramoncito el de la imprenta", como se le conocía, que "La imprenta fue establecida en la calle 4 (nombre colonial, Refugio) entre 11 (Amargura) y 13 (Compostela) por el Sr. José Mikleff (a la derecha) en el año 1886. Siendo este señor amigo de mi abuelo y maestro de mi padre, años más tarde, pasó la imprenta a su nombre, haciéndolo propietario de la misma. El Sr. Mikleff, cuyo apellido es de origen ruso, y mi abuelo Ramón, el mismo nombre de mi padre, fueron participantes en la fundación del Centro de Instrucción y Recreo.
Para mí la imprenta, como único negocio de este tipo, era una institución, que aparte de ser un negocio como otro cualquiera, podía decirse que era también un negocio cultural, puesto que allí se producían no sólo las órdenes comerciales, sino las publicaciones de revistas como las del C.I.R. y la del Club Atlético Santiago, diversos folletos, etc.
Recuerdo al Sr. Gilberto García Rizo, el "cajista" (empleado en una imprenta cuyo oficio es el de confeccionar, con sus manos, los textos que se han de imprimir, escogiendo los tipos de letras
Todavia me parece sentir el olor de la tinta y el sonido de la maquina de imprimir, yo iba a buscar utiles para la escuela especialmente el papel pram'
ResponderEliminarTambien comprabamos tinta lapices goma para borrar y libretas, Me parece ver a Ramoncito detras del mostrador y a pesar de la algarabia que formabamos y con la paciencia que nos atendia, yo disfrutaba mucho de ir a comprar a la imprenta.
El fue un icono (institucion) para Santiago.
Que descanse en Paz.
Siomara.
Xiomara Vigoa.
A Xiomara Vigoa, gracias por exponer los gratos recuerdos de sus visitas a la imprenta, cuando iba a comprar los útiles escolares que allí se vendían, como eran las cajas de lápices de colores, libretas, libros, el muy utilizado papel Prang para las clases de dibujo, y tantos otros artículos para la escuela. El recordar del sonido de las máquinas impresoras. Gracias por recordar a mi padre de una forma tan respetuosa, gracias.
ResponderEliminarSi desean comunicarse conmigo, con mucho placer los atenderé. Mi correo: adolfobalbi@yahoo.com
A. Roger Balbi Barceló
Al pasar por el frente de "La Imprenta de Ramoncíto Balbi", se percibia el penetrante olor a tinta y el roce de la correa con la polea que movía la maquinaria impresora, allí se hacían desde los programas de los dos cines, hasta las revistas como se enumera en este relato.No había niño escolar que no estuviera tentado a entrar en el lugar, lo mismo para ver los modelos que estaban en exhibición en una vidriera que daba al frente de la puerta de entrada, como a comprar una goma de mazapán para borrar lo mal escrito.Entre los que aparecen en esta histórica foto, conocí siendo niño a Palmiro Ortega, que fue uno de los presidentes del CIR, que tuvo la felíz idea de guardar todos los ejemplares de la Revista del CIR, que ojalá todavía se encuentren a buen resguardo en su casa fliar, en la calle 14 e/3 y 5,adonde fuí de vista tantas veces, la última poco antes de salír de Cuba, a despedirme de Mercedita su hija menor(QEPD)que eramos amigos desde niños.También aparece otro notable santiaguero: "Panchito Montoto", nuestro primer historiador oficial, el promotor de celebrar por primera vez en Cuba "El Día de Las Madres", acompañado por otros valores santiagueros como: Musiú Gravier, Panchito Simón, Guillermo Gener y otros.La muerte temprana impidió que Panchito culminara su investigación sobre la historia de Stgo, que "Francisco Fina García" con gran devoción llevó hasta los años finales de los 50's del pasado siglo XX.
ResponderEliminarmuchomario1945@hotmail.com