GALERÍA
la historia ilustrada de un pueblo cubano

lunes, 11 de febrero de 2013

La calle 4 frente a la iglesia y al Parque Juan Delgado

Sin fecha: La calle 4 entre 13 y 15 frente a la iglesia de Santiago de las Vegas (a la izquierda de la imagen) y el Parque Juan Delgado (a la derecha), tal como aparecía en la tercera o cuarta década del siglo XX, estando aún sin pavimentar. Al fondo se aprecia un carro de época junto al famoso portal de la Ferretería Garrigó, que en aquellos tiempos tuvo uno de los principales expendios de gasolina de nuestro pueblo, establecido por su distinguido dueño el comerciante y banquero Don José Garrigó y Artigas. Pulsando sobre la imagen, podrá apreciar el gran letrero de la General Motors en el friso que corona las columnas jónicas. Hacia la derecha, entre las copas de los frondosos árboles, se divisa un cartel de lo que parece ser una compañía de construcción.

Por la acera izquierda, a mitad de cuadra y como si acabaran de salir del pequeño y encantador Parque Alberro al sur de la iglesia, dos niños pasean en un carro de juguete, siguiendo quizás a la señora que va unos pasos más adelante. ¿Quiénes serían? ¿Adónde irían, aquella tarde ya olvidada, casi poniéndose el sol, a juzgar por las largas sombras? ¿A casa? ¿Al mismo parque? ¿O a tomar un refresco en el kiosco, cuyo techo hexagonal se asoma por encima del muro de la iglesia?

Redacción: José Alberto Balido

4 comentarios :

  1. Cuando veo estas fotos me pregunto...¿Que pasó a nuestro Santiago de las Vegas?, porque siendo tan hermoso ha quedado tan destrozado. No lo digo solamente por el mal estado en que hoy se encuentra el pueblo sino porque el parque no es el mismo que a mediados del siglo XX. Cambiaron hasta las farolas, las plantas, los mármoles del monumento a Juan Delgado...¿Era necesario tanto destrozo, tanto cambio para peor?.
    Cancio.

    ResponderEliminar
  2. Seré el primero en comentar!
    Vemos una típica vista de lo que fuera esa área alrededor del Parque Juan Delgado y frente a la Iglesia, ya explicada por el amigo José Alberto. En todo el panorama se destaca la "cúpula" del conocido y visitado Kiosko de Berardo, donde además de ser lugar para comer y beber lo allí exhibido, muchos pasaban el tiempo charlando, mientras ingerían lo pedido. Al lado del kiosko, como todos recordarán, estaba la "piquera" de los autos disponibles para ser alquilado por los ciudadanos que lo necesitaran para realizar un viaje determina- do,a la capital u otro lugar, donde en un omnibus no se podía realizar.
    Les escribió: A. Roger Balbi Barceló

    ResponderEliminar
  3. Ver esta prespectiva de esa calle me llena de nostalgia, porque tantas veces la frecuenté de niña...

    Los dos parques de Santiago, el de Juan Delgado, amplio, con frondosos árboles bordeándolo, y el que mi familia y yo conocíamos como "el parque de la glorieta", me proporcionaban una maravillosa sensación de paz y tranquilidad. Eran un oasis verde y tranquilo en medio del pueblo, que nos invitaba a desacelerar la marcha y respirar. Las hojas meciéndose en la brisa, el canto de los pájaros, el silencio, porque recuerdo esos parques tranquilos y callados, tenían algo muy reconfortante para el espíritu.
    Qué importantes son los parques así en cualquier comunidad... Y cómo los extraño en esta época de expressways y de corre-corre, en el que todo el mundo se queja de falta de tiempo. Creo que si tuviéramos un parque cerca, para sentarnos a disfrutar de la brisa y del silencio, tendríamos una perspectiva más relajada de la vida y menos estrés, no creen, mis amigos santiagueros?

    ResponderEliminar
  4. En este segundo comentario, donde esta persona detalla con lujo, las características del Parque Juan Delgado, llamado Parque Nuevo, no dá su nombre. El que se haga el escrito bajo: Anónimo, no significa que se tenga que evitar poner el nombre, al contrario, debe ponerlo para saber quién fué el contribuyente, a la vez, al identificarse es probable que encontremos una amistad de la cual no sabíamos por largo tiempo. Si no soy indiscreto, ¿quién eres? Gracias, A. Roger Balbi Barceló

    ResponderEliminar